domingo, 13 de enero de 2013

Una de Peñas Blancas e inicio a la RDLF 2013


SABADO. 12/01/2013

Hoy nuestras montañas de la comarca de Cartagena, se engalanaban con sus mejores vistas, para recibir entre sus senderos y acantilados a un equipo de lujo.



Más que equipo. Familia, amigos, compañeros y hermanos si cabe el caso decirlo.

Porque como os cuento, el específico que se ha llevado a cabo en el día de hoy, es para guardarlo en el recuerdo.

Viniendo desde la localidad de la Unión para unirse a tal evento, al Makinón de Xisco, junto a su compañero y espartano de los buenos, Noé.

En nuestro campamento base 2 (casa de Ingles en el Portús), les esperarían el resto del grupo.

Por un lado. El majestuoso y siempre honorable Antonio Ibarra. Seguido de no más grande si cabe que Antonio, pero en su justa medida Grandioso, Ángel Mayor, (el cual debo decir, que tremenda sorpresa me he llevado al verlo, porque en el día de ayer nos ponía en conocimiento que no iba a poder asistir a dicho específico). Nada más llegar lo que nos ha dicho ha sido; “anda que me iba yo a perder esto”. Ja j aja. Que bueno y que agradecido estoy por ello.



En la contienda todavía faltaban por aparecer y lo hacían al momento, el gran Mister Morcillo,  junto con nuestro querido Dani Campos y la presencia inimitable de nuestro hermano “Spidermán Inglés”.

Por último, nombrarme a mí mismo, para completar los 8 ultrafondísta de órdago que en el día de hoy nos dábamos cita en el paraje de la entrada del Portús, para dar inicio a todo un sueño.

La programación estaba clara. Inglés, nos ponía en adelanto, que aproximadamente serían unos 28 Km. de ruta.

Antonio Ibarra en este caso, nos acompañaría en solo un tercio del específico, por no disponer de más tiempo y tener que irse a entrenar con el equipo.



La preocupación en mi caso para afrontar el específico en toda regla, era que no me diera tiempo a realizarlo en su totalidad ya que sobre las 14:00 horas me tenía que ir a hacia la localidad de Águilas para que mi hijo jugara un partido de baloncesto.

Inglés me ha sacado de dudas al momento al decirme, “tranquilo hermano que te da tiempo, no te preocupes”.

Pues ya no había marcha atrás y dábamos por comenzado el específico.

El primer tramo a batir, ya para desatrancar venas y poner las piernas calientes era, la vertiente que une el portus, con el monte de la muela. Por su parte más escarpada, y en este caso por su parte más técnica y más inclinada.



Poco a poco, nos adentrábamos en el corazón de tremendo paraje. Dejando a nuestra izquierda unas vistas maravillosas de toda la playa del Portus.

En cabeza (os lo podéis imaginar). Antonio Ibarra, Xico y Ángel Mayor. Más atrasados, íbamos Daniel Campos, Mister Morcillo y un servidor, para metros atrás, seguir y a ritmo nuestro Inglés y Noé.

Todo ese tramo lo hemos realizado consecuentemente porque sabíamos que lo que nos quedaba por delante aún era mucho y había que afrontarlo de las mejores maneras.

En todo lo alto de la muela, lo que tocaba era descender por una vertiente (que hace escasos días ya la habíamos entrenado), pero no quitaba que se disfrutara de nuevo, junto a semejantes espartanos, para que esta nos llevará hasta el camino principal de boletes y desde ahí, pasando cercanamente por la antigua Casa Cuartel de la Guardia Civil, tomáramos rumbo por un nuevo ascenso y en este caso nada técnico pero si que muy exigente, para dejarnos caer hasta llegar a la playa de la Zohía.



Antes de llegar a la Zohía, concretamente en el cruce que da en la antigua Casa Cuartel de la Guardia Civil, Antonio Ibarra nos abandonaba, para coger él dirección Cala Aguilar y subir otra vez hasta lo alto de la muela y volver hasta donde tenía estacionado su vehículo. Una lástima el que no nos haya podido acompañar en su totalidad y durante todo el trayecto.

Contar con su presencia y experiencia, para el resto del grupo es un auténtico placer. Pero se que en un futuro (y él lo sabe), vendrás más específicos y de los buenos.

Prosiguiendo con nuestro entrenamiento y llegados como os decía a la playa de la Zohía, todo ese tramo debo decir que ha sido precioso.

A la vez que transitábamos por una rambla preciosa, a nuestra izquierda (nuestro universo nos daba la oportunidad de observar en todo su esplendor), las Antenas y pico de Cabo tiñoso, para seguir adentrándonos por más ramblas y caminos, a veces también tocando algo de asfalto, para llegar justo hasta la misma orilla del Mar Mediterráneo.



Y de que manera. Y con que olores. A vida nunca mejor dicho.

Ese olor a mar que nos embargaba al llegar a la Zohía y mientras corríamos por su paseo marítimo hasta llegar casi a las playas de Isla Plana, han hecho que el momento cobrara un sentido especial.
A la izquierda mar, y a nuestra derecha montañas y más montañas. Divisándose a lo lejos la vertiente que en breves Km. íbamos a dar comienzo.

En este caso y adentrándonos por la rambla del Cañar, la cuestión era seguir hasta llegar a una vertiente que nos conduciría a lo más alto de Peñas Blancas.

Nuestro compañero  Inglés, nos ponía en antecedentes antes de dar comienzo a dicho ascenso.

No sin antes, hacer una parada técnica en un abrevadero (fuente de lujo que nos hemos encontrado en el camino), y la cual nos ha venido a las mil maravillas y nos ha salvado a más de uno.



Repuestos, tanto de líquido como de sólidos, hemos continuado rambla hacia adentro hasta coger la senda, o mejor dicho vertiente, la cual una vez iniciada, Dani Campos, con claros signos y aspavientos, me decía que la afrontáramos tranquilos, (nunca mejor dicho), que amarra el pony, que lo que teníamos delante se las traía.
En lo más alto, y donde señalaba nuestro Inglés, era donde teníamos que subir para dar por concluido dicha ascensión.

Y vaya si estaba alto. Hemos partido desde una cota 0 de desnivel a ras de agua, para llegar casi a los 600 m en positivo que tiene Peñas Blancas.

Cuando ya nos hemos adentrado de pleno en dicho tramo, no me acordaba que planificando las etapas mi gran amigo Inglés, (y que en este caso el sobre apodo de Spiderman, le viene al pelo), en ellas el kilómetro se compra caro.

Joder con la subida.  I M P R E S I O N A N T E, si cabe decirlo. Aparte, cuando la veáis en el trac de ruta, veréis que pedazo de colmillo hasta llegar a lo más alto.

He flipado. Ha habido un momento que cada uno ha ido por la vertiente que mejor le venía. Para llegado el caso, salir al mismo tramo.



Pero ese momento para mí ha sido precioso. Llevar delante de mí a mi Mister Morcillo, mostrándome el camino.

Mirar hacia a un lado y otro y ver al resto de compañeros como entre ellos y nuestra madre naturaleza por el desnivel impuesto por ella se peleaban,. Y más en lo alto aún, a nuestro Xisco y Ángel Mayor, abriendo veredas.

Porque ha habido momentos que te hacían pensar que te encontrabas en el Cañón del Gran Colorado. En ese tramo en concreto la presencia de mi gran hermano y (jefe indiscutible en la distancia de la tribu), ANDRÉS MOLINER , se hacía patente.

Ahí me hubiera gustado tenerlo delante de mí. Como el siempre nos dice, con el pasico de al abuela pero sin pararse.



Aquí, donde os situo, no se si llevando el pasico de la abuela, el del abuelo o de su puta madre. Lo hicieras como lo hicieras la vida te iba en ello. Y con momentos de hasta poder llegar a despeñarte.
Pero precioso. Guapísimo toda esa subida la cual hemos podido disfrutar en primera persona junto a mi grupo.

Ya arriba del todo, y conseguido lo conseguido, lo que tocaba era hacernos la foto de rigor en el refugio de Peñas Blancas.

Ahí he repuesto de nuevo fuerzas con unas super mega golosinas energéticas, que se ha sacado de la chistera ( como un gran mago), nuestro Dani Campos.

Me he comido dos solamente y con sabor a coca cola, que me han sentado de puta madre.



Eso y un par de higos secos que me ha dado mi hermanico Inglés, que he de decir, que de esa clase nunca los había probado y estaban buenísimos.

Viendo mi reloj, en todo lo alto de Peñas Blancas, éste marcaba en ese preciso momento las 12:00 de la mañana. Dirigiéndome a Inglés y con bastante preocupación por mi parte, (por saber lo que nos quedaba para llegar de nuevo hasta el portús (unos 12 km), y donde teníamos estacionado los vehículo) le decía, que de que manera íbamos a plantear el regreso ya que como sabía, a las dos en punto tenía que estar, duchado, cambiado y comido y con dirección hacia la localidad de Águilas para presenciar un partido de baloncesto de mi hijo.



Es lo bueno de mi Inglés. Que a pesar de saber que el tiempo nos apremiaba, nos tranquilizaba con unas alentadoras palabras, al decirme que no me preocupara que como muy tarde a las 13:00 estaría de vuelta a casa.

Un poco apretado de tiempo, pero de vuelta a casa y para poder presencia dicho partido de baloncesto junto al resto del equipo de mi hijo.

Os lo podéis imaginar, como se afrontó ese último tramo del específico. Deciros que tuvimos que acortarlo y saltar al asfalto y carretera principal que nos llevaría hasta la localidad de Perín, y por una de sus vertientes y bajando por la famosa cuesta del Pijo, nos adentraríamos por unos parajes preciosos para llegar a parar a un lugar de culto para el grupo.



Ese lugar esta ubicado en la pedanía de Galifa. Concretamente en la casa de nuestro añorado y querido maestro,  ANDRÉS MOLINER.
Fotaka de rigor junto al grupo y repuestos de nuevo. Saltábamos al asfalto y nos dejábamos caer por una carretera que nos llevaría hasta la carretera principal y pasado el restaurante el Ramírez.



Ya en la general y viendo del tiempo que disponíamos, parte del grupo y en este caso los que iban en cabeza (Xisco, Ángel y Dani Campos), determinaban coger dirección rambla del portus hasta llegar de nuevo hasta donde teníamos los vehículos estacionados.
Mister Morcillo y el que suscribe, seguimos por el asfalto hasta llegar justo a la rotonda que da descenso hasta llegar a la casa de nuestro inglés.

Allí, ya presente se encontraba Xisco, y minutos después, hacían acto de presencia el resto del grupo para dar por finalizado el pedazo de entrenamiento que habíamos llevado a cabo en el día de hoy y horas antes.

En total y según marcaban nuestros GPS, nos habían salido 35 km. En un tiempo de ejecución de 4horas y 30 minutos.

Si tengo que definir dicho específico en un solo adjetivo, ese sería sin dudarlo, BUENISIMO.



ENLACE DE RUTA SEGÚN GPS: 

http://connect.garmin.com/activity/261249698

Gracias compañeros, por haberme hecho tan feliz, durante la ejecución del mismo. Nos vemos en el próximo específico.

DOMINGO 13/01/2013

En el día de hoy nos hemos dado cita para llevar a cabo otro específico y de los buenos, el que suscribe y la cerillica (mi mujer).



La consigna para llevar a cabo este entrenamiento estaba clara. Aproximándose las fechas para que se celebre en breve en mi ciudad de Cartagena, la  IV Ruta de las Fortalezas 2013, hoy íbamos a llevar a cabo el primer específico dedicado a dicha competición.

La cerillica nunca la ha competido en sus tres últimas ediciones. Y este año, me dijo que le haría ilusión poder correrla a mi lado.
Dicho y hecho. La comida como le dije, ya estaba servida y el mantel encima de la mesa.

Lo que tocaba era, a partir de ahora y hasta que llegue el día de la competición (20 de Abril 2013) , realizar específicos encaminados a realizar dicha competición y con ellos te garanticen que la vas a dar por finalizada.

Para situaros, os diré que no es una prueba convencional, la cual sin apenas entrenarla te puedes apuntar y hacerla.



Estamos hablando de una competición de 50 Km y de montañas, con un desnivel en positivo de casi 1600 m, y los cuales, si no los entrenas y llevas a cabo como es debido, ese día lo pagas y de que manera.

No te lo digo por experiencia ,(porque modestamente), yo para todas estas barbaridades kilométricas, el factor psicológico lo trabajo más que nada.

Ese facto psicológico del que os hablo no es otra cosa que correr, correr y correr, y cuando ya no os queden más ganas de correr, entonces hacéis 10 Km. más.

Ese es el kit de la cuestión. Que los Km. os salgan a borbotones por todo vuestro cuerpo y hechos de las mejores formas.



Hablo de las mejores formas, en relación a lo consecuente que debéis ser para que no os lesionéis en el intento.

Bueno, pues con toda esa predisposición y con la motivación por las nubes, aparcábamos el vehículo y saltábamos para dar comienzo a tremendo espectáculo.

El día que nos acompañaba estaba encapotado. Cubierto y sin ningún atisbo de que nuestro Lorenzo nos hiciera el entrenamiento más ameno.

Pero, como yo digo, también vienen bien estos días. No va a ser siempre calor, calor y más calor.



Días nublados, lluviosos o con frió, también hacen que le encuentres otro especial sentido a tu entrenamiento.

También vienen bien, porque llegado el caso, dime que el día elegido y a la hora “H” todo se vuelve oscuro y tenemos tormenta.
Por lo menos nosotros, los espartanos, estaremos preparados para afrontar lo que nos echen.

Aunque tengamos que echarnos al lomo una canoa y en tramos de la competición rememos. (Especialmente en la zona de la Rambla de Benipila), jajajaja.

Continuando y volviendo al tema que más nos interesa. Como os decía, en el primer entrenamiento específico para tal evento, lo que íbamos a entrenar iba a ser diferentes puntos de la competición para que la cerillica se aprendiera el recorrido.



En este caso el primer tramo elegido y el cual ella no conocía era el de la zona de la Batería de fajardo y Trinca Botijas. Ahí, justo a la entrada y que da inicio a tal referida zona, estacionábamos el vehículo y nos adentrábamos por una pista la cual no te deja indiferente por las vistas que te hace presencia a la vez que corres.
Durante todo ese tramo iba memorizando el camino, hasta que llegábamos a todo lo alto de la Batería de Fajardo.

Desde allí, nos hemos dejado caer por su pista principal y hemos enlazado con otro camino y en sentido ascendente para llegar a un cruce el cual te predetermina el poder subir hacia el castillo de galeras o descender hasta salir de nuevo a la carretera general que te lleva hasta la misma puerta de los astilleros de Bazán.

Ese tramo no es nada complicado ni técnico, pero requiere el ser consecuente y saber el ritmo impuesto porque si te excedes en él, luego lo pagas.

Una vez hemos llegado a dicho cruce, no hemos llegado a subir a lo más alto del Castillo de Galeras, porque el sentido de ascenso y descenso es único.



Nos hemos dirigido de nuevo hasta donde teníamos el vehículo, y nos hemos marchado a la zona de la pescadería en Santa Lucía.

Allí, en los aparcamientos del Restaurante Varadero, lo hemos estacionado, y de nuevo nos hemos echado a la calle, para seguir disfrutando de tanta maravilla paisajística en mi ciudad de Cartagena.

Dirección hacia la segunda cumbre a batir el día de la competición llamado MONTE DE SAN JULIAN, nos adentrábamos en sus casi tres kilómetros que tiene de ascenso hasta llegar a su castillo.

Antes de llegar, y por cubrir otro de los tramos los cuales la cerillica no conocía, nos adentrábamos por una senda la cual en una de las curvas del citado Castillo, nos haría descender por unas vertientes y acantilados, hasta llegar a la Cala conocida como Cala Cortina.



Esa bajada ha sido especial porque en el transcurso de la misma hemos coincidido con un buen amigo y compañero como es Pablo Saourin y su grupo de corredores.

El momento ha llevado a que saquemos a la pekeñica (cámara de fotos), y lo inmortalicesemos con una fotografía.

De ahí en adelante, hemos continuado descendiendo hasta llegar al altiplano y zona de aparcamientos de Cala Cortina.

Desde allí, hemos salvado la zona que nos evita pasar por el interior del túnel y por donde pasan los vehículos por la carretera principal, para salir al borde del desfiladero y acantilado donde podemos observar al faro de navidad y el faro de la curra con todos sus barcos de guerra, en todo su esplendor a la vez que corríamos.



 Todo ese trayecto se nos ha hecho cortísimo Disfrutábamos a la vez que corríamos y la sensación de cansancio no hacia acto de presencia en nuestros cuerpos.

De esa manera hemos vuelto a pasar por delante de donde teníamos estacionado nuestro vehículo, y hemos continuado para adentrarnos por un sendero dividido en dos y a ambas partes césped, con una gran pista de atletismo dibujada en el suelo y parte central, y que nos haría llegar hasta lo más alto de una de las zonas universitarias de nuestra Cartagena.

Desde ahí, lo que tocaba era seguir corriendo y coronar otro castillo de ensueño como era el Castillo de los patos.

Desde ese mirador las vistas que tenemos de nuestra ciudad os la podéis imaginar.



San Julián a nuestra izquierda, un poco a la derecha y más en su parte central el monte de Galeras, y un poquito más a la izquierda el Castillo de las Atalayas.

Todos estos montes y castillos de los que os hablo, son destinos obligatorios de paso el día de la competición. 

Son cinco cumbres como cinco soles, y ahí delante nuestra las teníamos para situarnos.

Descendidos el citado Castillo de los Patos, nos hemos encaminado al interior del Teatro Romano de Cartagena (precioso en todo los sentidos), y desde ahí hemos saltado de nuevo al interior de nuestra ciudad de Cartagena para transcurrir por su cuesta de la Baronesa, (cuantos recuerdos me trae esa zona), calle Cañón, plaza del ayuntamiento, plaza de San Agustín, y al final de esta, nos hemos dirigido de nuevo hasta donde teníamos el vehículo estacionado para dar por concluido el entrenamiento de hoy.



Antes de dar por finalizada esta crónica, quería daros las gracias por vuestro apoyo y ánimos a nuestro paso y cuando coincidimos entrenando.

Las muestras de cariño son tremendas por parte vuestra hacia mi persona. Y eso os puedo asegurar que hace que toda esta magia cobre sentido.

Os dejo con esta crónica tan extensa, porque como en el día de ayer no pude introducir nada, y mañana me toca trabajar todo el día, espero que no os aburra y os divirtáis con ella.



Un fuerte abrazo y os deseo que tengáis unas felices sensaciones mientras llevéis a cabo vuestros entrenamientos, específicos o competiciónes.

Bijainnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn

1 comentario:

  1. Aqui uno de esos que se te cruzas y te tiran algun grito ....... Gracias por compartir esos videos y fotos , pues nos vemos reflejados muchos que nos gusta esto de los montes y el aire libre , aunque con una condicion fisica muy lejos de la tuya y tus socios de ruta . Gracias por compartir esas rutillas por Cehegin , Portman y La Union , Sierra Espuña , Peñas blancas , Los montes de Cartagena , La muela , Ronda , el veleta Y un monton mas de ellas en especial ESPERANZA PARA DAVID ...... Y Alguna caida que otra jejejejejeje ....... Un saludo y te seguire dando algun grito !!!!!! Si me cruzo en tu camino .....

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